Los meses que el Gobierno nos ha tenido esperando a ver en qué concluía su tan anunciada reforma fiscal, con la comisión de expertos fiscales por medio, ha terminado una vez más en decepción. Decepción podría ser la palabra si no fuera porque implica una nueva vuelta de tuerca a la injusticia fiscal que venimos padeciendo con la excusa de la crisis de fondo. Vamos a ver la falacia del IRPF, cómo no solo no baja sino que para algunos sube, que a los autónomos no les baja el IRPF solo las retenciones a cuenta, y cómo, finalmente, los módulos se convierten en un método de estimación de la renta para muy pocos.
Se toca el IRPF, el Impuesto de Sociedades y el IVA, pero, no para hacer que disminuya la presión fiscal sobre las rentas medias, que, al contrario, se va a elevar y mucho, si no para disminuirla a las rentas más bajas, aunque en pequeñísima proporción, lo cual nos parece adecuado por supuesto, pero lo que no nos parece adecuado en absoluto es que las rentas más altas, las fortunas, el patrimonio, las grandes empresa, no solo no contribuyan en más de lo que lo han venido haciendo sino que salen clarísimamente beneficiadas de esta reforma fiscal que el gobierno propone y que entraría en vigor en 2015.
Vamos a centrarnos en el IRPF que es lo que nos afecta a todos. Con un especial detenimiento en el descalabro que el Gobierno propone para los módulos.
Bajada de las retenciones del 21% al 15%
En relación con los autónomos, se nos dice que a los que menos facturan, hasta 12.000 euros anuales se les van a bajar las retenciones del 21% actual al 15%. Pero esto no podemos confundirlo con una rebaja fiscal porque no lo es. Las retenciones son los pagos a cuenta que hacen los autónomos, como los trabajadores por cuenta ajena la parte que le descuentan en la nómina en concepto de IRPF. Es decir, son cantidades que se adelantan para hacer frente a la declaración de IRPF del año. Lo que viene sucediendo es que las retenciones del 21%, extraordinariamente elevadas para la mayoría de los autónomos en función de su facturación, implica que Hacienda se ve obligada a devolver importantes cantidades en la declaración de la renta a estos autónomos porque ya lo han adelantado y realmente no les correspondía, porque su renta es baja. Por lo tanto, de rebaja fiscal para los autónomos con menos recursos nada de nada, lo que sucede es que dejan de adelantar las enormes y desproporcionadas sumas que venían adelantando, porque a partir de ahora Hacienda les devolverá menos dinero al haber ingresado bastante menos a cuenta del impuesto.
70.000 autónomos más fuera de módulos
Del transporte solo, nos referimos. La reforma fiscal que pretende debatir y aprobar en otoño el Gobierno incluye la tan aireada reforma de los módulos. Lo más importante sobre esta reforma es que se rebajan los límites para poder tributar en módulos a 150.000 euros de ingresos (no de beneficio, solo facturación) pero, si la facturación se realiza con otros profesionales, empresarios o sociedades, es decir, no se factura a particulares entonces el límite se rebaja a 75.000 euros anuales. Esto, en la práctica deja afuera a la mayor parte de los autónomos que no fueron expulsados ya con la anterior reforma.
Pero, como se han dicho muchas cosas en la prensa, y no todas correctas, queremos dejaros claros los siguientes puntos:
- Si bien la mayor parte de las modificaciones del IRPF y del IVA entrarían en vigor a partir de Enero de 2015, sin embargo, la modificación del régimen de estimación objetiva (módulos) no entrará en vigor hasta Enero de 2016.
- En consecuencia durante el año 2015 continuará vigente, y será de aplicación por tanto, el actual régimen de módulos tanto en sus requisitos como límites (no más de cinco vehículos).
- La modificación que propone el Gobierno, insistimos para que entre en vigor para 2016, establece que no podrán acogerse a módulos aquellos autónomos con unos rendimientos íntegros, esto es una facturación superior a 150.000 euros anuales en el año anterior y siempre que el autónomo no haya facturado a empresas o profesionales por importe superior a 75.000 euros. Por lo tanto, dado que en el sector del transporte de mercancías la mayoría de los transportistas autónomos facturan a empresas, no a particulares, el límite que deberán tener en cuenta es el de 75.000 euros de facturación. Además como contempla el Anteproyecto de ley, previsiblemente en 2016 se reducirá el límite de número de vehículos máximo que permite acogerse al régimen de módulos (actualmente establecido en 5 vehículos).
Las clases medias pagarán la rebaja a las altas
El Gobierno ha desaprovechado la gran ocasión que tenía de hacer una reforma fiscal de calado que es lo que demanda el país y los expertos. Se ha limitado a maquillar el IRPF de forma que las rentas medias van a pagar las rebajas de calado que se ha hecho a las rentas más altas.
Las rentas más bajas salen ligeramente beneficiadas de la reforma, se les reduce la presión fiscal ligeramente, tampoco hay margen para mucho más, y esto es muy fácil de hacer porque apenas afecta a la recaudación global por IRPF pero electoralmente es en el grupo social donde más impacto va a causar, y es que es, por desgracia, un sector de la población donde hay un importante número de posibles electores.
A las rentas más altas se les beneficia de forma indiscutible, con un ligerísimo aumento de la presión fiscal en sus rentas de trabajo, profesionales o empresariales pero con un clarísimo beneficio en la fiscalidad del ahorro. Porque la obtención de más de 50.000 euros de rendimiento de los capitales invertidos tributará lo mismo que una renta del trabajo de 20.000 euros al año (un 24% en 2015 y un 23% en 2016). Cuando hablamos de las rentas más altas, hablamos de rentas por encima de los 150.000 euros, un porcentaje de votantes que apenas llega al 0,3%. Otro motivo más que nos hace valorar esta reforma como regresiva, injusta y decepcionante: las deducciones en una familia numerosa son las mismas se obtenga la renta que se obtenga, es decir, se puede deducir lo mismo una familia numerosa que ingrese 125.000 euros al año que una ingrese 25.000 euros
En consecuencia, las rentas medias, las comprendidas entre los 30.000 y 60.000 euros van a ser las grandes pagadoras de la reforma fiscal anunciada y que entrará en vigor el 1 de enero próximo. Y si se es soltero sin hijos o casado con hijos mayores de 25 años… Habrá que echarse a temblar… para que un porcentaje mínimo de la población no se irrite y pueda seguir disfrutando de sus enormes privilegios, ahora también fiscales.
Y esto no es fraude fiscal consentido, no. Pero sí que lo es lo de los autónomos en módulos, que por otra parte han venido estando amparados por la Ley.
¿Y tú qué opinas de esta más que decepcionante reforma fiscal? ¿Nos va a aliviar? ¿Nos va a permitir comprar más? ¿Va a permitir a los pequeños empresarios vivir más desahogados?
Los módulos era la única compensación económica que me quedaba y me dejaba un poco de margen para los imprevistos. A partir del 2016 pues iré en la cuerda floja a expensas de dichos imprevistos para poder seguir realizando la actividad. Otra, dicen que los módulos era cuna de los fraudes, cuando a mi me interesaba facturar cuanto más mejor. A partir de hora será lo contrario, cuantas más facturas me pueda evitar de hacer mejor.
Hola Máximo
Como suele decirse «tienes más razón que un santo»… aunque te explico algunos puntos, sobre todo en relación con los módulos y el fraude. El fraude para muchos de los módulos viene precisamente de facturar por servicios no realizados realmente porque así tienes un IVA que cobrar que no te ha supuesto ningún gasto. Las llamadas facturas falsas que parece ser que los autónomos en módulos emiten como churros… Según Hacienda y según muchos empresarios, flotistas en nuestro caso, y organizaciones empresariales que les representan.
Con la reforma fiscal, que el Gobierno ha anunciado, y que todavía no está publicada, los módulos dejan de tener razón de ser para la inmensa mayoría de los transportistas, al menos los que os dediquéis al pesado, ya que el límite serán 75.000 euros de facturación a particulares y 150.000 en total.
Siempre hemos dicho y mantenido que en los módulos habrá quien defraude (con facturas falsas)… pero la mayor cantidad defraudada es la que realizan las grandes empresas, las grandes corporaciones empresariales que no pagan ni siquiera un 5% de media en concepto de Impuesto de Sociedades, gracias a todos los beneficios fiscales, entramados societarios y demás recursos que a ellos sí se les permite. Y la reforma fiscal no pone remedio a esto.
Son ya muchas las voces, incluso dentro del partido del Gobierno, que han manifestado su completa insatisfacción por esta más que decepcionante reforma fiscal.