Pues va a ser “o qué” la respuesta a la pregunta, porque estos ojos han sido testigos de cómo un Actros se conduce sólo, a sí mismo, en condiciones reales de circulación, de cómo responde a situaciones imprevistas como la aparición de un vehículo averiado, o a la llegada de un vehículo de emergencias al que hay que dar paso, y todo gracias a la tecnología que los fabricantes de camiones se han visto obligados a desarrollar en los últimos años, pero sobre todo gracias al desarrollo de la conectividad, un término que refleja una realidad que no conoce límites. No sabemos en dónde puede terminar la conectividad… todos hemos visto películas de ciencia-ficción en la que gran parte de la trama se desarrolla basándose en una interconexión entre los diferentes seres, entre los seres y las máquinas… Y está claro que éste va a ser uno de los puntos peliagudos y más discutidos del camión autónomo, cómo solventar la protección de datos en un mundo interconectado hasta la saciedad.
Pues ahora la interconexión servirá, en cuanto la legislación y el mercado estén maduros para ello, para que los camiones se conduzcan de forma autónoma, eso sí, siempre con un conductor a bordo que dejará de ser conductor para pasar a ser gestor de transporte.
A priori, puede parecer una seria amenaza para el puesto de conductor, pero si lo pensamos más despacio… se abre realmente un mundo de infinitas posibilidades, sobre todo para los autónomos. Ahora ya podemos hacer la mayor parte de las gestiones por internet, administrativas, burocráticas, financieras, ocio… en el futuro aún más. El empresario podrá ir a bordo del camión a la vez que va realizando estas tareas, sin necesidad de tener otra persona (con frecuencia un familiar, como no queremos que nos acusen de machistas no vamos a decir que la mujer o la novia, o la madre, porque a veces también es el padre o un hermano) que se las solucione, sin tener que duplicar las horas de trabajo.
Podrá reservar mesa en un restaurante o plaza en un parking antes de llegar; conocerá cualquier incidencia que suceda en la ruta que lleva con la suficiente antelación para poder tomar decisiones con el suficiente tiempo; podrá atender a los clientes tranquilamente, aceptar otras cargas, gestionar la documentación,…
Las posibilidades se multiplican hasta el infinito. Y siempre, dentro de los parámetros de la máxima eficiencia y seguridad con las que el camión autónomo va a estar desarrollando su trabajo.
Hay otras cuestiones que me producen curiosidad cómo se van a solucionar, ¿qué pasará con los tiempos de conducción y descanso? ¿Va a ser conducción también el tiempo que el conductor va a bordo del camión en marcha pero sin llevar el control del mismo? ¿Y los tiempos de trabajo? ¿Ese tiempo va a ser otros trabajos, disponibilidad…?
En Mercedes-Benz afirman que el camión autónomo va a contribuir a dar salida a las crecientes necesidades de transporte en Europa en los próximos años de forma eficiente y racional, contribuyendo a la disminución del consumo y a la mayor fluidez en el tráfico. Porque la base del camión autónomo es la conducción racional, preventiva y segura. Y eso será en 2025, tomando la fecha como referencia de lo que puede tardar en ser una realidad atendiendo a los requerimientos legales que se precisan (modificación de la Convención de Viena, de las legislaciones de circulación nacionales,…) y que van a llevar su tiempo.
La tarta la ha empezado Mercedes-Benz, pero estamos seguros que esto no va a terminar aquí.
Y a vosotros qué os parece, ¿Os preocupa? ¿Os morís de ganas por subir a bordo de un camión autónomo?
Si quieres ver vídeos de cómo funciona el camión autónomo, pincha aquí.
A priori, puede parecer una seria amenaza para el puesto de conductor, pero si lo pensamos más despacio… se abre realmente un mundo de infinitas posibilidades, sobre todo para los autónomos..POBRES AUTONOMOS ,o hay muchos cambios? O los autonomos tenderan a desaparecer ( ALGUIEN NO NOS QUIERE DECIR LA VERDAD) .
[…] otra parte, Mercedes-Benz, marca perteneciente a Daimler, una de las compañías firmantes de este “libro blanco”, ha […]