Los transportistas de portavehículos, agrupados en TRANSPORTAVE (asociación integrada en FENADISMER) han hecho pública una carta dirigida a los operadores y flotistas que manejan este subsector para explicarles cómo y porqué han llegado al límite de su capacidad de aguante en relación con las pésimas condiciones en las que se ven obligados a realizar su trabajo.
El sector del transporte de vehículos está dominado por unos pocos operadores y flotistas que tienen la exclusividad en los contratos de transporte con los fabricantes de vehículos y camiones.
Como no disponen de vehículos propios, subcontratan a autónomos y pequeñas empresas para realizar este transporte. Y subcontratan en unas condiciones ya tan deterioradas que los transportistas agrupados en TRANSPORTAVE han dado un paso adelante para comunicar a sus «contratadores» que es imprescindible revertir la situación puesto que «el colectivo está llegando a su límite y antes o después la situación será insostenible.»
Lo que denuncia TRANSPORTAVE es lo siguiente:
- Un trato personal que roza «la indecencia y la esclavitud». Los transportistas no tienen ninguna capacidad de negociación y los operadores y floristas mantienen una actitud de desprecio hacia sus proveedores de transporte.
- Las instalaciones de carga y donde desarrollan su actividad están en un estado lamentable; no se atienden las mínimas necesidades de los conductores.
- Se ven obligados a realizar tareas que no les competen: como la carga de los vehículos en el camión, la búsqueda de los vehículos en la campa; el reconocimiento del estado del vehículo teniendo que asumir a su costa los daños o faltas que pueden ser consecuencia de la manipulación del vehículo o no, incluso se dan situaciones en las que se pretende cargar al transportista con daños ya conocidos por el operador para que éste asuma el coste de la franquicia en su caso y, si no alcanza, el coste de la reparación.
