Transportista investigado por delitos de lesiones por imprudencia y manipulación, tras provocar un accidente con un herido grave al invadir el carril contrario por una posible somnolencia, circulando con la tarjeta de tacógrafo de otra persona y tras realizar entradas manuales falsas.
La Guardia Civil investiga a un transportista como presunto autor de un delito de lesiones por imprudencia y otro de falsedad documental continuada, tras provocar por la noche un accidente el pasado mes de febrero en la A-124, en Aragón, al invadir el carril contrario y colisionar frontalmente con un turismo, cuyo conductor resultó herido grave.
En la investigación llevada a cabo por diferentes unidades de la Guardia Civil se ha constatado que la somnolencia fue posiblemente la causa de que el conductor del camión invadiera el carril contrario. En una primera inspección in situ se comprobó que en el tacógrafo se encontraba alojada la tarjeta de un familiar, lo que generaba registros falsos de las actividades de conducción y descanso, y se considera un delito de falsedad documental (manipulación de los registros de los tiempos de conducción y descanso).
En un análisis posterior más minucioso, se comprobó que el transportista también realizaba entradas manuales falsas, con el objetivo de incrementar los periodos de conducción, reduciendo de este modo su tiempo de descanso. Además, se comprobó que había efectuado estas prácticas en más ocasiones, no sólo el día del accidente.
Tras finalizar la investigación, llevada a cabo por el Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Zaragoza, el Grupo de Investigación y Análisis del Tráfico (GIAT) y especialistas en inspección de transportes del Sector de Tráfico de la Zona de la Guardia Civil de Aragón, este transportista pasa a estar investigado como presunto autor de un delito de lesiones graves por imprudencia y otro de falsedad documental continuada, además de ser denunciado también por distintas infracciones administrativas graves y muy graves a la normativa de transportes. Por otra parte, el familiar que le cedió su tarjeta de tacógrafo también está investigado como cooperador necesario en un delito de falsedad documental continuada.
