
Francia, como Portugal, Alemania y Bélgica, ha decidido cerrar sus fronteras para evitar la propagación del Covi19. Y, aunque los transportes internacionales de mercancías pueden continuar con su actividad esencial, serán también controlados en las fronteras por lo que se producirá una inevitable ralentización.
Los elevadísimos niveles de contagios en toda Europa están llevando a varios países al cierre total de sus fronteras, a presentar una PCR negativa realizada en las 72 horas anteriores y a establecer controles en las fronteras áreas, marítimas y terrestres.
El conductor de un transporte internacional de mercancías por carretera está exento de presentar una PCR negativa pero sí tiene que acreditar su actividad con el Certificado de Desplazamiento elaborado por la Comisión Europea.