El Congreso de los Diputados está a favor de la jubilación anticipada de los conductores profesionales, tal y como ha quedado de manifiesto al no oponerse ningún grupo político en la votación de la proposición no de ley que sobre este asunto ha planteado ERC.
La Comisión de Transportes del Congreso de los Diputados aprobó ayer, 9 de abril, una proposición no de ley de ERC para poner en marcha la jubilación anticipada de los conductores profesionales, tal y como recomiendan la Unión Europea, los sindicatos, estudios universitarios y la propia Seguridad Social.
Ningún grupo político votó en contra de esta proposición no de ley, que el mismo grupo político planteó en 2018, y también fue aprobada, en un paquete que incluía medidas para las mejoras de las condiciones de trabajo de los conductores profesionales.
FENADISMER, junto con otras organizaciones empresariales y sindicales, lleva años reclamando la necesidad de establecer una jubilación anticipada para los conductores profesionales, tanto por cuenta ajena como autónomos, con el establecimiento de unos coeficientes reductores.
Como ya os comentamos aquí, la Seguridad Social, junto con sindicatos y organizaciones empresariales, está empezando a trabajar en un borrador que acerque la jubilación anticipada a colectivos que ahora están fuera, a pesar de las duras condiciones de su trabajo, como el conductor profesional.
La Federación manifiesta que la propia Seguridad Social abre esta puerta al establecer expresamente que “la edad mínima de jubilación en el Régimen General de la Seguridad Social podrá ser rebajado en aquellos grupos o actividades profesionales cuyos trabajos sean de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa, insalubre o causen elevados índices de mortalidad”. Para FENADISMER, evidentemente, hay que extender esta opción a los autónomos inscritos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
Lamenta FENADISMER que la única opción aproximada que existe en el sector, con una profesión reconocida como penosa y peligrosa, sean las Ayudas para el cese de la actividad, que solo alcanza a unos pocos centenares de transportistas autónomos mayores de 64 años, debido a que el presupuesto está muy limitado.
Es evidente que la edad es un factor de pérdida de capacidades sensoriales, cognitivas y motoras, todas ellas necesarias en perfecto estado para el desempeño de una actividad como la conducción profesional, con implicaciones importantes no solo en la salud de los trabajadores del sector, si no en el resto de usuarios de las vías públicas. Esto por sí solo justifica el establecimiento de unos coeficientes reductores que permitieran a los conductores profesionales jubilarse antes de la edad obligatoria sin ver penalizada su prestación económica. Estamos hablando de un colectivo de más de 390.000 conductores de camión y 70.000 de autobús.
Inés Granollers, diputada de ERC, ha sido la ponente de esta proposición no de ley y ha afirmado en su intervención que «se ha destacado que los profesionales del transporte son un colectivo de riesgo, como reconoce la propia Organización Internacional del Trabajo (OIT), debido a la peligrosidad de su actividad”. Además dicha situación se ha agravado en los últimos años, debido “al reciente empeoramiento de sus condiciones laborales, fruto de las consecuencias que se siguen arrastrando de la anterior crisis económica junto a un aumento de la edad media del colectivo, han provocado un incremento de los índices de siniestralidad y morbilidad”.
A partir de los 55 años, la tasa de incidencia de accidentes de trabajo es tres veces superior en el colectivo de conductores profesionales que en otros colectivos de la misma franja de edad. «Pese a ello no ha sido todavía considerada como uno de los sectores profesionales objeto de aplicación de los coeficientes de reducción de la edad de jubilación por parte del Gobierno de España, aun habiendo sido recomendado por la Unión Europea, sindicatos, universidades o la Seguridad Social”, continúa Inés Granollers.
La diputada catalana terminó su intervención haciendo un llamamiento al Gobierno sobre este asunto al instar al Gobierno español a “tomar las medidas necesarias e impulsar las reformas legislativas oportunas, para el establecimiento de coeficientes reductores para rebajar la edad de jubilación de los trabajadores del sector de conductores profesionales con el fin de reducir los altos índices de siniestralidad y mortalidad que padece el sector y dignificar sus condiciones de vida y laborales”.
