El plazo de pago en el transporte se sitúa por primera vez en 64 días desde que FENADISMER elabora el Observatorio de la Morosidad en el Transporte. Con este plazo medio, se sitúa muy cerca del plazo legal de 60 días.
El trabajo que está llevando a cabo los Servicios de Inspección controlando los plazos de pago a los transportistas por parte de sus clientes, y sancionando cuando lo incumplen, está dando sus frutos: el plazo de pago en el transporte, correspondiente a marzo de 2024, se ha situado por primera vez en 64 días, desde que FENADISMER elabora junto con la Fundación El Quijote el Observatorio de la Morosidad en el Transporte. Muy cerca del plazo legal de pago que son 60 días, en el sector privado. En el sector público, cuando es una administración la que contrata y paga, son 30 días.
De los clientes de los transportistas que incumplen la ley de plazos de pago, un 70% son incumplimientos leves, con plazos que no superan los 90 días desde que se prestó el servicio de transporte; un 7% paga todavía a más de 120 días.
El modo preferido de pago sigue siendo la transferencia (un 68%), seguido del confirming (28%), pagaré (4%) y cheque (menos del 1%).