Tras meses de subidas de los carburantes, y de la energía en general, la actual situación internacional no ha hecho nada más que agravar de forma contundente la incertidumbre, lo que se ha reflejado en una mayor subida de los precios de la energía, que parece no tener fin. Por ello, FENADISMER solicita al Gobierno que intervenga los precios de los carburantes para evitar el colapso del transporte de mercancías por carretera.
De marzo de 2021 a marzo de 2022 el precio del gasóleo ha subido un 36%. Se espera de forma inminente nuevas subidas, importantes, de la energía. La luz lo estamos viendo día a día y el gasóleo casi cada día. La situación de incertidumbre en la que llevamos meses, muy agravada por la invasión de Ucrania por Rusia, no ha hecho más que empeorar la situación para los más de 100.000 transportistas españoles que, si ya antes tenían problemas para repercutir la variación del precio del gasóleo, ahora aún más, ya que negociar día a día el precio del transporte es muy complicado.
El Real Decreto aprobado la semana pasada, fruto de las negociaciones del Comité Nacional y el Gobierno en diciembre, recoge la obligatoriedad de que los precios del transporte recojan las subidas del gasóleo. Y es obligatorio, sin posibilidad de pacto en contra, desde el día siguiente a su publicación en el BOE, es decir, desde el pasado 2 de marzo.
Se estima que los vehículos de más de 12 toneladas, tendrían que subir a día de hoy un 12% sus precios de transporte por la escalada del precio del gasóleo entre marzo de 2021 y el mismo mes de 2022. Pero, previsiblemente, a lo largo de los próximos días nos encontremos con más y más subidas del precio del gasóleo en surtidor. Es prácticamente imposible que los transportistas puedan repercutir estas subidas en sus clientes, lo primero por la reticencia de los mismos y lo segundo por la rapidez con la que van subiendo los precios de la energía.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este pasado fin de semana, afirmó que su Gobierno intervendría los precios de la energía, si fuera necesario, para poner a salvo a las familias y pequeños empresarios. Porque, mientras que las compañías energéticas, de luz o combustibles, no hacen más que incrementar sus beneficios, los autónomos, pymes y familias apenas pueden funcionar con estos precios.
Especialmente afectado para mal es el transporte de mercancías, que depende del combustible en cualquier caso para poder operar, por eso FENADISMER solicita al Gobierno que, con carácter urgente y excepcional proceda a intervenir el mercado de los combustibles en España, limitando los precios máximos de venta, como el sistema que estuvo vigente en la década de los años 90, mientras se mantiene la actual situación de incertidumbre y volatilidad del mercado de la energía a nivel internacional.
