El Gobierno francés ha decidido aplazar hasta el 1 de marzo de 2013 la entrada en vigor de la posibilidad de sancionar a los conductores de vehículos a motor que no vayan provistos de un etilómetro a bordo.
Según el Decreto francés que establece esta obligación, desde el pasado 1 de julio todos los conductores de vehículos a motor que transiten o circulen por territorio francés deben ir provistos de dicho etilómetro aunque no se empezaría a sancionar por no llevarlo hasta el próximo 1 de noviembre. Sin embargo, la incapacidad de los conductores para poderse hacer con este aparato obligatorio en tiempo y precio adecuado, ha obligado a la Administración francesa a posponer no la obligatoriedad de llevarlo a bordo, pero sí la fecha a partir de la cual se empezará a sancionar.