Ikea incluye furgones eléctricos de pila de hidrógeno en su flota. La multinacional sueca amplía su flota en Austria con cinco furgones Quantron QLI FCEV, un chasis cabina con 400 kilómetros de autonomía con cada repostaje de hidrógeno.
La flota de vehículos de Ikea Austria va a incorporar cinco chasis cabina Quantron QLI FCEV en su flota de reparto a domicilio. Los vehículos han sido fabricados por la empresa alemana Quantron AG, utilizando como base el chasis cabina de la Iveco Daily, en el que se instala el sistema de propulsión eléctrico, un tanque de hidrógeno y la pila de combustible de hidrógeno, producida por Ballard Power Systems, equipo que suministra la electricidad necesaria para mover el vehículo.
El tanque de hidrógeno que incorporan estos vehículos les permite circular unos 400 kilómetros entre repostaje, por lo que estos furgones se van a utilizar en las entregas fuera de las zonas urbanas.
Para las entregas en ciudad, con recorridos más cortos, Ikea Austria ya utiliza en el área de Viena 45 unidades del Quantron QLI BEV, vehículos eléctricos de baterías, más otras once unidades eléctricas en otras ciudades austriacas.
Se ha calculado que los 56 vehículos eléctricos de Quantron que ya formaban parte de la flota de Ikea están evitando que se emitan unas 450 toneladas de CO2 al año, cifra que se va incrementar en otras 160 toneladas de CO2 anuales con la incorporación de los cinco Quantron QLI FCEV.
IKEA Austria tiene como objetivo conseguir que en 2025 el 100% de sus entregas de última milla estén libres de emisiones de CO2.
