Los empresarios han reclamado al Gobierno que se plantee bajar las cotizaciones sociales que pagan las empresas y suban las de los trabajadores asalariados.
¿Por qué reclama esto la CEOE? Porque considera que es insoportable para las empresas el porcentaje de cotización social que tienen que aportar y que en España alcanza ya el 23% del coste salarial (teniendo en cuenta que esta cifra es una media, que hay sectores como el del trasporte donde el porcentaje sube), mientras que en otros países de nuestro entorno la media es muy inferior como el 14,4% de media en la OCDE o el 19,4% en los países del euro.
Y es que la empresa pone el 80% de la cotización de los trabajadores y el trabajador el resto, por eso, desde la patronal se pide que se baje algún punto la cotización de las empresas y se suba en la misma proporción la que hace el trabajador.
Y esto lo enlaza la CEOE con el debate de financiación de las prestaciones sociales. Hay algunas prestaciones, como la viudedad, la orfandad,… que están en el punto de mira y pueden ser las primeras en sufrir una agresiva reforma. Para CEOE, una forma de poner soluciones a la financiación de las pensiones es modificando la fuente de financiación, es decir, hay pensiones como las anteriores, más las prestaciones de maternidad, paternidad y riesgos durante el embarazo que pueden sacarse del fondo de pensiones y financiarse con las aportaciones sociales que hacen las empresas y los trabajadores, ya que el carácter de estas prestaciones es más social que asistencial.
La CEOE estima que sacar estas prestaciones del fondo de pensiones, podría ahorrar por encima de los 23.000 millones a dicho fondo.