Las empresas de asistencia en carretera tendrán que recurrir a la Dirección General de Seguros y a los tribunales para poder repercutir sus costes en las tarifas, tras agotar toda vía de diálogo con las diferentes compañías de seguros, y tal y como expresó UNESPA en la reunión mantenida con la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera.
Las compañías de seguros no tienen claro, bueno tienen muy claro pero en sentido negativo, que las relaciones que mantienen con las empresas de asistencia en carretera puedan considerarse incluidas dentro del ámbito de aplicación de la normativa de transporte, por lo que no creen que les afecta el Real Decreto 3/2022 y, en consecuencia, no tienen porqué repercutir en los precios que pagan a estas empresas las subidas del precio del gasóleo.
Y así lo han mantenido en los dos últimos años, negándose a actualizar tarifas, cuando el precio del gasóleo ha alcanzado precios insoportables y motivó la publicación de este Real Decreto Ley por parte del Gobierno, para dar cumplimiento a sus compromisos con los transportistas representados en el Comité Nacional del Transporte en marzo de 2022.
En la última reunión mantenida por la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera con UNESPA (Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras) se ha puesto de manifiesto que estas compañías creen que es la Dirección General de Seguros, dependiente del Ministerio de Economía, quién tiene que pronunciarse al respecto y confirmar si las compañías de seguros tienen que asumir esta repercusión del alza del gasóleo en sus tarifas.
Puesto que no es posible avanzar más en el diálogo con las compañías de seguros, después de más de un año intentándolo, la Alianza no descarta acudir a los tribunales, además de a la Dirección General de Seguros, para que se pronuncien sobre este tema.
Por otra parte, en la última reunión mantenida entre la Alianza y UNESPA, sí que ha habido cierta apertura a valorar la inclusión de un mayor coste cuando la asistencia se realiza a un vehículo eléctrico, como se había trasladado por carta, ya que el auxilio en este tipo de vehículos entraña mayores riesgos y unas exigencias de equipamiento y formación por parte de los operarios que no requieren los vehículos de combustión.
UNESPA se ha comprometido a estudiar los procesos y costes derivados del tratamiento de los vehículos eléctricos para incorporar nuevos conceptos tarifarios en los contratos que estas empresas mantienen con las compañías aseguradoras, clubes automovilísticos y plataformas de asistencia en viaje.
Para Xavier Martí, portavoz de la Alianza de Auxilio en Carretera, se trata de un “importante avance en la normalización del diálogo entre ambas partes, que, a buen seguro, permitirá mejorar las condiciones de las relaciones comerciales de toda la cadena de asistencia”.
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