Por primera vez en muchos años, los plazos de pago del transporte se aproximan a los plazos legales de pago. En el mes de agosto el plazo medio de pago ha sido de 64 días. El plazo máximo legal de pago son 60 días. Los datos procedes un mes más del Observatorio permanente de la Morosidad de la Fundación El Quijote.
Casi un año después de aprobarse y entrar en vigor el régimen sancionador de la morosidad en el transporte, los plazos de pago en el sector han visto una reducción significativa: han pasado de 75 días en julio a 64 días en agosto.
Si tenemos en cuenta que el plazo legal de pago es de 60 días, podríamos afirmar que estamos ya muy cerca de conseguir acabar con una práctica que ha dañado y mucho al sector del transporte y que ha obligado a muchas empresas a cerrar su actividad por falta de liquidez.
Pero, FENADISMER recuerda que no hay que lanzar las campanas al vuelo y que hay que seguir vigilando los plazos de pago, con una activa actuación por parte de los servicios de inspección, para que esta significativa reducción no sea coyuntural, sino que se instale como forma habitual de trabajo en el transporte: pagar dentro de los sesenta días siguientes a la realización del servicio.
Dentro de los datos del Observatorio correspondiente a agosto, se constata que hay todavía un porcentaje de clientes (cargadores, operadores, intermediarios…) que siguen incumpliendo la Ley, un 48%. De ellos, un 36% pagan a más de 90 días y un 17% a más de 120 días.
Los medios preferidos de pago por parte de los clientes siguen siendo los mismos de meses anteriores: transferencia (71%); confirming (23%), pagaré (5%) y cheque (menos del 1%).
