Y no descartan que puedan sucederse también paros en su actividad. Así lo manifestaron tras la Asamblea celebrada ayer en Sevilla en la que más de 500 empresarios del sector afirman estar en situación de quiebra por la negativa de sus principales clientes, las aseguradoras, de repercutir los costes en las tarifas. Incluida la obligación legal de repercutir el coste del gasóleo en el precio.
La Alianza Nacional de Auxilio en Carretera ha convocado movilizaciones de las empresas de grúas de asistencia en carretera tras la Asamblea celebrada ayer a la que asistieron también otras organizaciones del sector.
Tras dos rondas de negociaciones con sus principales clientes, aseguradoras, clubes automovilísticos y plataformas de asistencia en viajes, la conclusión es que estos se niegan a repercutir la subida de costes de los últimos diez años, en los que no se han modificado los precios que cobran. Los empresarios del sector estiman que al menos los precios deberían subir un 40% para cubrir este aumento de costes, especialmente el del gasóleo.
Las compañías aseguradoras, que solo en el primer semestre han aumentado sus beneficios por encima del 9% y más de 2600 millones de euros, estiman que la obligación legal de tener que repercutir en los precios que pagan la subida del gasóleo no les aplica. Y no solo la subida del gasóleo, si no que se niegan a repercutir en los precios la subida de cualquier otro coste, incluido lo que cuesta mantener el servicio de asistencia 24 horas/365 días a la semana.
Ante la negativa de sus principales clientes de cumplir con este mandato legal, la Alianza ha anunciado que lo pondrá en conocimiento de la Dirección General de Seguros que depende del Ministerio de Economía y de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, porfi se estuviera incumpliendo alguno de los principios que caen bajo su competencia.
De momento, octubre comenzará con movilizaciones de las empresas de asistencia en carretera. No se descarta que más adelante puedan producirse también paros, en función de cómo continúen las negociaciones y si no hay soluciones realmente satisfactorias para las empresas que les saquen de la situación penosa en la que se encuentran.
