El Gobierno ha comunicado la prórroga en los módulos de 2024 del límite de facturación de 125.000 euros. A partir de 2025 se anuncia un nuevo régimen fiscal para los autónomos, como prevé la normativa comunitaria. Además, el Gobierno ha anunciado el fin de las ayudas al combustible para los transportistas a partir del 1 de enero.
El Gobierno ha aprovechado su último Consejo de Ministros para aprobar la prórroga de los módulos en 2024 con el mismo límite de facturación de 125.000 euros que viene utilizándose desde 2016, cuando ya debería haberse bajado este límite de facturación anual para permanecer en módulos a 75.000 euros.
Pero, las sucesivas situaciones políticas y económicas han ido llevando a prorrogar año tras año, hasta siete veces, el límite excepcional de 125.000 euros para poder permanecer en el régimen de módulos el año siguiente. Por lo tanto, nunca ha llegado a estar en vigor ese límite reducido.
Y si todo es como se espera no va a entrar nunca, ya que para 2025 se anuncia un nuevo régimen fiscal para los autónomos, conforme a la Directiva comunitaria, que establece un régimen en franquicia del IVA para los autónomos que facturen hasta 80.000 euros (límite que España va a mantener) en operaciones nacionales. En IRPF se les aplicaría la estimación directa, si bien, se espera que los primeros años en un sistema transitorio con importantes deducciones, de forma similar a lo que tienen en el País Vasco y Navarra, comunidades que disponen de su propio régimen fiscal.
En ambas comunidades los transportistas autónomos pueden tributar en módulos en el IVA (con un límite de facturación para 2024 de 250.000 euros), y el IRPF se les aplica la estimación directa con una reducción del rendimiento neto en torno al 50%.
Además, el Gobierno ha aprobado mantener una serie de ayudas a la energía de cara a 2024, entre las que no se encuentran las ayudas a los combustibles para los transportistas, quienes, a partir del 1 de enero, pagarán el precio del combustible en surtidor.
El Gobierno justifica esta decisión por la “contención” de los precios de la energía en los últimos meses y porque el escenario que se maneja de cara a los próximos meses es que el precio del petróleo siga bajando o se mantenga.
Además, estas ayudas afectan a las finanzas públicas, a los objetivos de déficit y a la deuda pública. Sin embargo, el Gobierno se muestra consciente de que tanto la guerra de Ucrania y Rusia como el conflicto entre Palestina e Israel están generando una situación de incertidumbre importante en la política y economía mundiales, lo que podría volver a afectar negativamente a los precios de los combustibles.
