Las cabinas P y L son las destinatarias de las primeras soluciones eléctricas de Scania: un camión 100% eléctrico con una autonomía hasta 250 kilómetros y otra versión híbrida enchufable con 60 kilómetros en modo eléctrico. Pero, anuncia el fabricante sueco, esto es solo el principio de su proceso de electrificación de toda su gama de camiones, incluidos los pesados de larga distancia y los de construcción.
El Acuerdo de París, con el que Scania comparte los objetivos y por lo tanto la necesidad de disminuir las emisiones para evitar el calentamiento global del planeta, implica trabajar en un sistema de transporte libre de combustibles fósiles. Para Scania se trata de un objetivo al alcance de la mano, que conlleva importantes inversiones y beneficios.
La electrificación es solo una de las estrategias de transporte sostenible en las que trabaja el fabricante sueco que también está muy enfocado en el uso de combustibles renovables.
Pero la electrificación tiene que llegar de la mano de los clientes, para eso, Scania va a trabajar codo con codo con aquellos transportistas interesados en dar el paso a la electromovilidad. Lo primero es realizar un estudio personalizado para adoptar la mejor alternativa, con opciones adaptadas para cada cliente que contribuya de manera inequívoca a la eficiencia y a la rentabilidad de su negocio.
Las dos primeras opciones que ahora lanza Scania son un camión 100% eléctrico en las cabinas P y L, para distribución urbana, principalmente, y un motor híbrido enchufarle, también disponible en las cabinas P y L junto con un motor de combustión de 9 litros. En los próximos años, la gama se irá completando con nuevas soluciones eléctricas hasta completarla en unos pocos años con camiones pesados de larga distancia y construcción que precisarán tan solo 45 minutos para cargar las baterías.
Camión eléctrico Scania para las cabinas P y L
En el caso del camión eléctrico, el cliente puede montar cinco o nueve baterías. Del número de baterías depende la autonomía, 130 kilómetros en el primer caso, hasta 250 kilómetros en el segundo. Teniendo en cuenta que la climatología, la carga y la topografía influyen mucho en la duración de las baterías.
Con cinco baterías la energía entregada al motor eléctrico (de 230 kW, lo que equivale a 310 CV en un motor de combustión) es de 105 kWh y con nueve baterías de 300 kWh. Una de las baterías se sitúa en el túnel motor, ya que no hay motor de combustión, y el resto en los laterales del chasis. La carga de las baterías se realiza por 130 kW CC con un conector de Sistema de Carga Combinado (CCS) en un tiempo de recarga de 55 minutos para cinco baterías y de 100 minutos para nueve. La frenada regenerativa también va suministrando energía a las baterías durante la conducción.
Camión híbrido enchufable Scania para las cabinas P y L
En cuanto al híbrido enchufable, cuenta con tres baterías con una capacidad de 90 kWh para un motor eléctrico de 115 kWh. Las baterías se carga de 0% a 80% en 35 minutos. También utiliza la energía regenerativa de la frenada para recargar las baterías. En modo eléctrico, el híbrido enchufable de Scania cuenta con una autonomía de 60 kilómetros (en función siempre de la climatología, carga y topografía). El motor de combustión es un 9 litros en tres niveles de potencia: 280 CV, 320 CV o 360 CV. Si se combina el motor eléctrico con un motor de combustión alimentado por combustibles renovables, las emisiones descienden considerablemente.
