En un control nocturno en la A2, realizado por la Guardia Civil, se inspeccionados 215 furgonetas de las que 76 resultaran propuestas para sanción administrativa o denunciadas directamente por diversas faltas administrativas o de seguridad vial, el resultado es esclarecedor sobre el sector de transporte ligero: una tercera parte de las furgonetas controladas, han resultado sancionadas.
La noche del 19 al 20 de septiembre, el Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Calatayud llevó a cabo un control específico sobre vehículos ligeros de transporte de mercancías en la A2, en la localidad de Ariza. Que el control se haya llevado a cabo en la A2 no es casualidad, es una ruta famosa por las condiciones en las que circulan las furgonetas en su ruta Madrid-Barcelona en horario nocturno.
De las 215 furgonetas controladas, 76 conductores han sido propuestos para sanción, es decir, algo más de una tercera parte de los vehículos controlados estaban incumpliendo la normativa de transporte y/o de seguridad vial.
Control de peso, documentación del vehículo, del conductor y de la carga, estado del vehículo, test de alcohol y drogas son los controles que se llevaron a cabo. La propuesta para sanción administrativa más frecuente ha sido por exceso de peso, algo demasiado habitual en este sector del transporte. De hecho, de los 76 conductores sancionados, 46 conductores lo han sido por exceso de peso.
También se han puesto doce denuncias por carencia de Certificado de Conductor (que tienen que llevar los conductores extracomunitarios); tres denuncias por carencia de autorización de transporte; dos denuncias por contratar a transportistas no autorizados; nueve denuncias por falta de datos en el documento de control; doce denuncias por exceso de velocidad; una denuncia por positivo en drogas y, además, dos conductores carecían de vigencia en sus permisos de conducir, es decir, habían perdido todos los puntos.
Aclara en su nota la Guardia Civil que el objetivo de este control es sobre todo prevenir siniestros con este tipo de vehículos, algo demasiado frecuente, por lo que es necesario realizar estos controles específicos de forma sistemática para comprobar el grado de cumplimiento de la normativa de transportes y a modo de concienciación de los conductores de lo peligroso de realizar conductas inapropiadas.
