En un evento enfocado a los clientes y a la red, Volvo Trucks ha exhibido su gama eléctrica en El Jarama, en Madrid, durante tres días. Conscientes de que electromovilidad no es para todos los transportistas, sí cree en la necesidad de que todos los transportistas tomen conciencia de las posibilidades del eléctrico, del amplio abanico de operaciones de transporte que puede cubrir y sobre todo, que esto es el principio.
Para Volvo Trucks, disponer de una gama completa de camiones eléctricos, de 16 a 44 Tn. de MMA es un motivo de máxima satisfacción. En un evento, que el Managing Director de Volvo Trucks España, Giovanni Bruno, ha calificado como de “un evento muy importante para Volvo Trucks”, clientes y red han podido acercarse en profundidad a la gama con los expertos Volvo y además tocarlos, verlos “in situ” y, sobre todo, probarlos.
Pero, sobre todo, el fabricante sueco quiere que sus clientes entiendan que con las nuevas tecnologías también cambia la relación con su hasta ahora, proveedor de camiones, porque las especiales características de los vehículos eléctricos, la preocupación por las baterías y el coste elevado de estos camiones ha profundizado aún más la tendencia de Volvo Trucks en ser un proveedor de soluciones. ¿Qué significa esto? Que el concesionario Volvo Trucks no vende un camión, vende una solución de transporte que incluye un camión, además de una estrategia de recarga, servicios y financiación. Y sobre todo mucho asesoramiento y acompañamiento durante todo el proceso.
Pero Volvo Trucks no trabaja solo en presente, tiene un pie puesto en el futuro y por eso trabaja sobre la base de que no todas las aplicaciones de transporte actuales las puede cubrir la electromovilidad con camiones de batería. Tampoco en el futuro: aplicaciones como el transporte de larga distancia que requiere muy amplias autonomías o el transporte especialmente pesado, requerirán de otras tecnologías para alcanzar las cero emisiones. El fabricante sueco trabaja en pila de combustible (hidrógeno) y anuncia que pondrá productos en el mercado en la segunda mitad de esta década.
En el presente, y futuro con potencias y capacidades aumentadas, la distribución urbana, los servicios municipales y el transporte regional pesado, que además son las operaciones de transporte que más combustible consumen por kilómetro, sí están cubiertos ya por camiones eléctricos de batería, como lo demuestra la gama que Volvo Trucks ha exhibido en El Jarama en noviembre.
Soluciones sostenibles de transporte ya en cartera
La gama eléctrica de Volvo Trucks cubre desde las 16 a las 44 toneladas (FL, FE, FM, FMX y FH), con motores eléctricos de 225 kW y 800 Nm a 490 kW y 2400 Nm. Lo que sí es realidad es que la gama actual de Volvo Trucks es capaz de hacer frente a casi el 50% de las necesidades de transporte actuales ya que son las que se desarrollan en ámbitos que no superan los 300 kilómetros. Autonomía que el FH y el FM cumplen sobradamente ya en la actualidad.
Todos los camiones eléctricos Volvo Trucks se entregan con el contrato de mantenimiento Gold activo durante todo el tiempo que el transportista tenga el camión a su servicio. Este contrato incluye la seguridad de mantener las baterías en el estado idóneo para cumplir con los trabajos para los que se diseñó el camión desde el primer al último día de servicio del mismo, lo que implica que siempre se va a disponer de la energía necesaria a bordo para cubrir la autonomía y prestaciones iniciales del camión. Cualquier incidencia con las baterías, Volvo Trucks se hace cargo de ella (incluye la reparación y el reemplazo si es necesario y la garantía de un nivel mínimo de energía utilizable asegurado durante toda la vida del contrato).
El contrato de mantenimiento y reparación Gold también garantiza la máxima disponibilidad y productividad del camión eléctrico con una monitorización de los principales componentes que es la clave del mantenimiento predictivo, conocer una avería antes de que suceda y ponerle remedio con el mínimo tiempo posible de paralización, lo que aumenta también la productividad del camión.
Los servicios de conectividad (Volvo Connect), algunos ya disponibles en la gama diésel, y otros nuevos, también contribuyen a aumentar la productividad de estos camiones: como el nuevo servicio Range and Route que simula la ruta y monitoriza la ruta en tiempo real, con análisis del uso de las baterías, las cargas, etc.; Energy and Environment es otro de los servicios disponibles, que ya está operativo para camiones diésel, que en los camiones eléctricos analiza el uso del motor eléctrico, las cargas de corriente continua (CC) o alterna (AC) de las baterías, la regeneración de energía en función del estilo de conducción del conductor, etc.
La aplicación My Truck cuenta con la funcionalidad Ready to Run que asegura que las baterías y la cabina están a la temperatura adecuada cuando se inicia la ruta: mejora la eficacia de las baterías con temperaturas muy bajas o muy elevadas y alarga la vida de las baterías. Si cuando el conductor coge el vehículo ya está a la temperatura deseada, la carga completa de las baterías se va a destinar a recorrer kilómetros, no a la climatización del habitáculo que se habrá realizada con energía consumida directamente del punto de recarga.
¿Cómo y por qué hacer la transición a la electromovilidad?
Para hacer la transición de los vehículos de combustión a eléctricos hay que hacer antes un análisis profundo y detallado de la operativa de transporte diaria de la empresa y de cuáles son sus necesidades. Una vez que tenemos esta información, se especifica el vehículo adecuado y los servicios asociados que va a precisar, se diseñan las rutas y de analiza la estrategia de recarga. Finalmente se pide el vehículo y se pone en marcha la solución de transporte diseñada por los asesores de Volvo Trucks junto con el transportista.
Pero, para hacer esta transición se necesita no solo la implicación de fabricantes y transportistas, si no también de las administraciones y de las propias compañías energéticas. Unos y otros tienen que comprometerse con los objetivos de descarbonización y sostenibilidad con la creación de una infraestructura de recarga adecuada que garantice la prestación de los servicios de transporte en las mismas condiciones que ahora y con la disponibilidad de ayudas y subvenciones en estos primeros pasos de la electromovilidad, tanto para la compra de vehículos como para la creación de infraestructuras de recarga. Además, ayudas fiscales y de mercado que potencien la rentabilidad de estos vehículos también son necesarias.
Porque, afirman en Volvo Trucks, cuando los vehículos eléctricos sean el principal producto vendido y producido, los costes bajarán y también el precio del camión eléctrico. Para entonces, probablemente las ayudas ya o serán necesarias.
Los motivos para hacer la transición a la electromovilidad son claros, además de los beneficios medioambientales:
-Mayor confort de conducción
-Descongestión del tráfico y disminución del ruido.
-Cumplimiento de la legislación con restricciones a la circulación.
-Mayor rendimiento económico por los menores costes operativos.
-Nuevas oportunidades de negocio al disponer de una flota cero emisiones.
Baterías, motores eléctricos, cajas y autonomías
Carmen Soto, Product Manager de Volvo Trucks España, incidió en su explicación en cómo la autonomía de los camiones no es estándar, puede darse un rango, pero no una cifra exacta porque su autonomía depende de muchos factores:
-De la temperatura ambiente: un 10% (especialmente con frío exterior por las necesidades de climatización de la cabina).
-De la carga: cada tonelada transportada necesita un 2% de la autonomía.
-De la velocidad media: aproximadamente 1,3% de la autonomía es necesaria por cada kilómetro/hora de velocidad.
-Neumáticos: un 5%.
-El estado de la batería también influye: un 20% más de consumo de diferencia entre una batería nueva o usada.
-El conductor: al menos un 20% del impacto en la duración de la batería depende del conductor, de ahí la importancia de su estilo de conducción y de que sepa optimizar el uso de la batería y regenerar energía de la forma adecuada.
El servicio Driver Coaching, con avisos en el salpicadero, analiza el estilo de conducción del conductor y le emite alertas y consejos para optimizar energía en tiempo real.
Los camiones eléctricos de Volvo Trucks disponen de tres estilos de conducción:
-Estándar: equilibra las prestaciones del vehículo con el estado de la carga.
-Range: prioriza el ahorro de energía sobre las prestaciones del vehículo.
-Performance: prioriza las prestaciones sobre la energía.
La gama media (FL y FE) cuentan con uno o dos motores eléctricos de hasta 225 kW y hasta cuatro baterías de hasta 565 kWh. Disponen de una caja de dos velocidades. Mientras que la gama pesada, FM, FMX y FH cuentan con dos o tres motores eléctricos de hasta 490 kW y 2400 Nm; pueden montar hasta seis baterías de hasta 540 kWh, con una autonomía media de 300 kilómetros y montan una caja I-Shift de doce velocidades con una nueva estrategia de marchas mejorada para los camiones eléctricos.
Las baterías pueden cargarse con Corriente Alterna (CA) en un plazo de ocho o 10 horas (con una potencia de salida de 43 kW en la gama pesada y 22 kW en la media) y en Corriente Continua (CC) con un tiempo de carga de entre una hora y media (al 80%) o dos horas (100%). Las potencias de carga son de hasta 150 kW en la gama media y de hasta 250 kW en la pesada.
