El Consejo Europeo ha aprobado la reforma de la Directiva de la Euroviñeta con normas más estrictas que tienen el objetivo de procurar el uso de camiones más limpios y que consuman menos combustible, es decir, que va a tener en cuenta las emisiones de CO2 de los camiones. Ahora pasará al Parlamento Europeo que lo aprobará sin problemas, y en dos años todos los Estados Miembros tendrán que trasponer estas normas.
La aplicación de la Directiva de la Euroviñeta es voluntaria, Europa no impone el establecimiento de peajes, pero si se fijan peajes, tienen que seguir estas normas, porque los peajes no pueden penalizar ningún tipo de transporte (el internacional o de largo recorrido, por ejemplo, como sucedía con el peaje en Guipúzcoa y que ha sido la razón de su nulidad por parte del Supremo) ni puede suponer una distorsión de la competencia entre empresas de transporte.
La nueva norma tendrá en cuenta las emisiones de CO2 de los camiones
La norma sobre la Euroviñeta a la que el Consejo Europeo ha dado luz verde incluye unas disposiciones más estrictas y amplias para incentivar unas operaciones de transporte más limpias y eficientes. Así, esta nueva Directiva de la Euroviñeta tiene en cuenta las emisiones de CO2, con el objetivo de reducir la huella de carbono del transporte, en consonancia con el Pacto Verde Europeo y el Acuerdo de París.
Nuevas normas para la imposición de peajes
La Euroviñeta actual, que tiene en cuenta el tiempo de uso de la vía, se eliminará gradualmente para los vehículos pesados de la red básica de la RTE-T en un plazo de ocho años a partir de la entrada en vigor de esta nueva Directiva.
Las carreteras a las que afectará esta eliminación gradual son las principales rutas por las que circula la mayor parte del tránsito internacional de vehículos pesados. Sin embargo, los Estados miembros podrán seguir aplicando la euroviñeta en función del tiempo de uso en otras partes de su red.
Podrá establecerse un nuevo sistema de tarificación combinado para los vehículos pesados, o para determinados tipos de vehículos pesados, que tenga en cuenta elementos basados en la distancia y en el tiempo y, además, integrar las dos herramientas de diferenciación (la nueva, que se basa en las emisiones de CO2 del vehículo y la ya existente, basada en las categorías EURO).
Se trata de que el nuevo sistema de fijación del importe de la Euroviñeta tenga en cuenta los principios de «el que usa, paga· y «quien contamina, paga». De esta forma, los Estados miembros contarán con la flexibilidad necesaria para diseñar sus propios sistemas de tarificación vial.
La Euroviñeta no se aplica exclusivamente a camiones: los Estados miembros pueden decidir a qué tipo de vehículos se aplican, aunque ahora la mayoría afecta casi exclusivamente a vehículos de transporte de mercancías. Pero puede afectar también a ligeros, turismos, autobuses, etc. Es cada Estado quién decide a qué vehículos se aplica y qué vehículos quedan fuera.
La nueva Directiva también indica que deben mantenerse los periodos de validez por tiempo. Así deberá haber viñetas con un período de validez de un día y de una semana o diez días, o ambos períodos. No obstante, los Estados miembros podrán disponer que la viñeta diaria únicamente pueda utilizarse a efectos de tránsito.
Las emisiones de CO2 se tendrán en cuenta par el cálculo del importe de la Euroviñeta
Un nuevo criterio de cálculo del importe de la Euroviñeta se introduce en la revisión de la norma y es que las tasas para los vehículos pesados varíen en función de las emisiones de CO2. La diferenciación se basará en las normas vigentes sobre emisiones de CO2.
El cálculo del importe de la tasa con las emisiones de CO2 se aplicará en un primer momento solo a os camiones más pesados, y, gradualmente, se extenderá a otro tipo de vehículos de transporte de mercancías pesados. También podrán tenerse en cuenta los avances tecnol´pogicos que incluyan los vehículos.
Se incluyen garantías para que los vehículos híbridos no sean recompensados dos veces y para evitar cualquier posible solapamiento de la diferenciación basada en las emisiones de CO2 con otros instrumentos de tarificación del carbono.
Las furgonetas y los minibuses no quedarán fuera de este cálculo por emisiones de CO2 indefinidamente: a partir de 2026 se aplicará también este factor de las emisiones de CO2 en el cálculo del importe del peaje que deben pagar las furgonetas y los minibuses.
Tasa por costes externos o contaminación atmosférica
En el cálculo de la tasa deben incluirse los tan «polémicos» costes externos del transporte, como la contaminación atmosférica. La nueva Directiva de la Euroviñeta prevé que la inclusión en la tasa de la contaminación atmosférica sea obligatoria tras un periodo transitorio de cuatro años. E, incluso, si los Estados miembros justifican ante la Comisión que el establecimiento de esta tasa supone un desvío del tráfico a otras rutas e incrementan significativamente la contaminación en esas áreas pueden no aplicar la parte correspondiente a la contaminación atmosférica.
En cualquier caso, los Estados deben repercutir en la tasa, Euroviñeta, la parte correspondiente a los costes externos de las emisiones de CO2.
La congestión puede tenerse en cuenta o no
La parte de la tasa que grave los costes externos de la congestión, que es opcional para los Estados miembros que establezcan Euroviñeta, debe revertir en soluciones de la congestión y en el desarrollo de un transporte más sostenible.
Además, las nuevas normas permitirán que los Estados apliquen un recargo de hasta un 50% a la parte de la tasa que grava el desgaste de la infraestructura en aquellos tramos de carretera que soportan una congestión elevada. Pero todos los Estados miembros afectados tienen que estar de acuerdo.
Procedimiento y siguientes etapas
Ahora el Parlamento Europeo debe adoptar el acto jurídico en segunda lectura, antes de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea. Pero, ya antes de esta aprobación del Consejo, había un acuerdo político sobre la propuesta de junio de este año, y el Comité de Representantes Permanentes del Consejo (Coreper) confirmó el acuerdo unos días más tarde.
Esta Directiva entrará en vigor a los veinte días de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea y los Estados miembros contarán con dos años, a partir de la entrada en vigor de la Directiva, para incorporarla a su Derecho interno.
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