Las Juntas Generales de Guipúzcoa han dado el visto bueno a la tercera norma foral desarrollada por la Diputación de Infraestructuras para implantar un peaje a camiones en la N1 y A15 a su paso por su territorio. De esta forma, cuando entre en vigor, Guipúzcoa cobrará hasta 0,28 euros el kilómetro a partir de 2023, cuando se ponga en marcha el nuevo sistema de peaje.
En la presentación de esta tercera norma foral por parte de la diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, ha querido dejar claro que se han visto obligados a elaborar una tercera norma foral por la «presunta discriminación contra los transportistas foráneos» de las dos normas forales anteriores, la de 2016 y 2018. Tumbadas ambas por el Tribunal Superior de Justicia del Pais Vasco y por el Tribunal Supremo. Y, aunque han recurrido al Constitucional, la tardanza en que este alto tribunal pueda emitir una sentencia les obliga a trabajar en esta tercera norma foral.
Confirma la diputada que la nueva norma foral incluye dentro del peaje la totalidad del recorrido de la N1 y A15 en Guipúzcoa. Un total de 76,356 kilómetros. Y confirma que con esta nueva norma foral «no hay ninguna posibilidad de interpretación de discriminación directa ni indirecta, ya que absolutamente todos los enlaces y movimientos existentes estarán sujetos a canon.»
Para ello se van a instalar cuatro nuevos pórticos troncales y 109 «banderolas» o semipórticos, con un coste total de 25,3 millones de euros. Lo que explica, a juicio de FENADISMER la necesidad de imponer un coste elevadísimo por kilómetro a los transportistas para poder financiar la instalación de toda la infraestructura necesaria.
El coste por kilómetro que prevé la tercera norma foral es muy superior al que venían pagando los transportistas hasta que el Tribunal Supremo emitió su última sentencia que dejo definitivamente,ente sin cobertura legal mantener el cobro del peaje a los transportistas: para los pesados entre 3,5 y 12 toneladas será un máximo de 0,22 euros/km y para los pesados con una MMA igual o superior a 12 toneladas el coste máximo del peaje será de 0,28 euros/kilómetro.
Como denuncia FENADISMER, estos importes convertirán a las dos carreteras, que no son precisamente vías de alta capacidad, en las dos más caras de todo el territorio español. Un transportista que viniera pagando 5,94 euros por el recorrido en territorio guipuzcoano, pasará a pagar 14,80 euros. Por el mismo recorrido.
Adecuar las carreteras N1 y A15 en Guipúzcoa a la nueva infraestructura necesaria llevará al menos un año, por ello, la diputada de Infraestructuras de Guipúzcoa considera que el nuevo peaje estará en vigor a finales de 2022 o principios de 2023.
Antes, la Comisión europea debe emitir un informe sobre la idoneidad de este peaje, que la diputada guipuzcoana no duda así será, «pues las sentencias han dejado claro que el problema no es establecer un peaje por uso», para lo que tienen plena capacidad, si no su supuesto carácter discriminatorio.
El destino final de la recaudación será para el mantenimiento de estas vías, como sucede con los peajes que se cobran en el resto de las vías del territorio guipuzcoano (AP8, AP1, A15, N1 y A636), de forma que se mantengan con los peajes pagados exclusivamente por los transportistas, y no con los impuestos de los guipuzcoanos.
Y es que la diputada guipuzcoana está convencida de que el camino correcto es el emprendido por ellos. Es el que impera en Europa y «el que deberá adoptar España a más tardar en 2024.»
