Acuerdo para incluir al transporte por carretera en el comercio de emisiones entre el Parlamento y el Consejo europeos. Se aplicará a través de los distribuidores de combustibles a partir de 2027.
Como ya adelantamos en julio, el Consejo de ministros de Medio Ambiente y el Parlamento Europeo estaban de acuerdo en aplicar al transporte por carretera un régimen de comercio de derechos de emisiones, a través de los distribuidores de combustible, que serán los que tengan que “comerciar” con los derechos de emisión. Pero Consejo y Parlamento diferían en el procedimiento a seguir. Finalmente, este domingo 18 de diciembre, los representantes de ambas instituciones han alcanzado un principio de acuerdo, que debe ser ratificado tanto por el Parlamento como por el Consejo para su aprobación final.
En el acuerdo se ha establecido que el sistema se aplicará a partir de 2027, pero en el caso de que los precios de la energía sean excepcionalmente altos, el inicio se retrasará hasta 2028. Además, si el precio de los derechos supera los 45 euros durante un determinado período de tiempo, se liberarán derechos adicionales, aumentando la oferta en el mercado, para contener su precio. Estas dos medias son para limitar un excesivo encarecimiento del precio de los combustibles como consecuencia del precio de los derechos de emisión.
También se ha acordado una excepción temporal para que los estados miembros puedan eximir a los distribuidores de combustibles de comprar derechos de emisión hasta diciembre de 2030, si estos ya están sujetos a un impuesto sobre emisiones de carbono a nivel nacional, cuyo nivel sea equivalente o superior al precio de subasta de derechos de emisión en el nuevo sistema de comercio de emisiones.
En este nuevo sistema de comercio de emisiones se ha incluido al sector de los edificios y el transporte por carretera y a los combustibles para algunos otros sectores, con el objetivo de “garantizar reducciones de emisiones rentables en estos sectores que hasta ahora han sido difíciles de descarbonizar”, según la comunicación oficial realizada por el Consejo Europeo.
En el mismo texto normativo se ha endurecido el sistema de comercio de emisiones que ya se aplica a grandes industrias intensivas en el consumo de energía, a los productores de energía y al transporte aéreo. Estos sectores, en lugar del 43% previsto inicialmente, tendrán que reducir sus emisiones en un 62% para 2030, en comparación con los niveles de 2005. También se ha decidido eliminar progresivamente los derechos de emisión gratuitos, reduciéndolos en un 48,5% en 2030, y el 100% en 2035.
Además, se ha creado otro sistema específico de derechos de emisiones para el transporte marítimo.
Régimen de comercio de derechos de emisiones
Un sistema de comercio de derechos de emisiones consiste, en líneas generales, es la asignación gratuita o la adquisición en subasta si el sistema es de «pago», de un número de bonus para producir emisiones en función de la actividad desarrollada. En el sistema de asignación gratuita, la empresa que mejore su nivel de emisiones sobre el volumen asignado, puede vender sus bonus sobrantes a las empresas que no alcancen sus objetivos, es decir, las empresas menos eficientes tienen que comprar bonus a otras empresas con menos emisiones. Para conseguir reducir las emisiones, cada año se va reduciendo la entrega de bonus; en el caso de los combustibles, la reducción será de un 5,38% cada año.
El nuevo sistema se aplicará a los distribuidores que suministran combustibles a los edificios, el transporte por carretera y otros sectores. Parte de los ingresos de la subasta se utilizará para apoyar a los ciudadanos vulnerables y las microempresas a través de un Fondo Social para el Clima, que estará dotado con hasta 65.000 millones de euros. Este Fondo se va a crear para hacer frente al impacto que puede tener en los precios de los combustibles la creación del sistema de comercio de derechos de emisión. También se concederán ayudas para, entre otras medidas, facilitar la implantación de la movilidad y el transporte de cero emisiones.
La incorporación del transporte por carretera a un sistema de comercio de derechos de emisiones forma parte del paquete de medidas “Objetivo 55” (Fit for 55) que tiene como objetivo permitir que la Unión Europea reduzca sus emisiones netas de gases de efecto invernadero en al menos un 55% para 2030 en comparación con los niveles de 1990 y lograr finalmente la neutralidad climática en 2050. Puedes encontrar más información sobre el proceso de descarbonización del transporte por carretera en nuestro cuadernillo especial.
