La Diputación Foral de Guipúzcoa no desiste de seguir gravando a los camiones que transiten por su territorio, por la N1 y la A15, a pesar de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco que lo declaró ilegal ya en el mes de abril. En su huida hacia adelante con el peaje sobre la N1, plantea instalar nuevos pórticos.
En enero entró en vigor el peaje que la Diputación Foral de Guipúzcoa impuso a los camiones que transitaran por la N1 y la A15 en su territorio. Para su cobro estableció una serie de pórticos situados de tal forma que causan más incidencia en los camiones que hacen larga distancia que en los que hacen solo transporte local, que pueden esquivarlos. Un peaje discriminatorio donde los haya. Así lo entendió, entre otros motivos, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y lo declaró ilegal.
La Diputación Foral de Guipúzcoa, manifestando una cabezonería o un voraz afán recaudatorio (son más de 10.000 los camiones que a diario transitan por estas carreteras), decidió mantenerlo mientras el Tribunal Supremo resuelve el recurso de casación que la Diputación ha interpuesto, aún asumiendo el riesgo de tener que devolver todos los importes cobrados durante estos meses si, como se espera, el Tribunal Supremo da la razón al Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y a los transportistas.
Ahora, en un alarde sin precedentes, considerado por muchos como una burla no solo de los transportistas, sino también de la Justicia, la Diputación Foral de Guipúzcoa ha anunciado que va a poner dos pórticos más para el cobro del peaje, uno en Astigarraga y otro en Andoain, ampliando el tramo sujeto al peaje y que haría que lo tuvieran que pagar, tanto los camiones que pasan en tránsito internacional, como los que solo hacen local.
El planteamiento de la Diputación Foral es que al ampliar el tramo, el peaje dejaría de ser discriminatorio y de esta forma, con este nuevo parche legal, pueden seguir cobrándolo a todos los camiones que transiten por la N1 y a15 en su territorio.
FENADISMER no duda en calificar esta propuesta de la Diputación Foral de Guipúzcoa de «burla» y de absoluta falta de respeto, no solo a los transportistas de todo el territorio nacional, incluidos los guipuzcoanos, sino a la justicia que dictaminó en su día la ilegalidad del peaje a camiones en la N1 y en la A15.