Del 10 al 16 de febrero, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil ha llevado a cabo un control de camiones y autobuses, dentro de una campaña de TISPOL. La conclusión es clara, los tiempos de conducción siguen siendo el punto más débil de nuestro sector y la mayor fuente de infracciones de la normativa de transporte.
Durante esta semana de control de camiones y autobuses, los agentes de tráfico de la Guardia Civil han controlado a 19.499 conductores. De ellos han sido sancionados 4.823 conductores de camión y 120 conductores de autobús. Y un total de 116 camiones han sido inmovilizados por diferentes motivos.
Una vez más, el mayor conflicto viene del cumplimiento de los tiempos de conducción y descanso y del tacógrafo. Así, se han puesto 1.976 denuncias (solo 23 a conductores de autobús) de las cuales 493 corresponden a infracciones relacionadas con el tacógrafo. El resto, excesos en tiempos de conducción, o minoración de los tiempos de descanso.
Los excesos de peso o mala estiba de la carga son otra fuente importante de conflicto con los agentes de la Guardia Civil. En total se han puesto 702 denuncias, una solo a un conductor de autobús, el resto a camiones.
En relación a la documentación obligatoria, relativa al conductor o al vehículo, se han detectado 808 infracciones por irregularidades administrativas. De ellas, 758 corresponden a camiones.
La velocidad, el circular a una velocidad mayor de la permitida ha dado lugar a 121 denuncias, de ellas 118 a conductores de camiones, el resto de autobuses.
El cinturón de seguridad es un elemento considerado clave en la seguridad del conductor. En esta campaña, se ha denuncia do a 142 conductores de camión y 18 de autobús por no llevarlo puesto cuando era obligatorio.
Y, finalmente, en control de drogas y alcohol, solo se ha sancionado a conductores de camión, En concreto, 17 conductores por positivo en drogas y 11 por positivo en alcohol.